BIBLIOTECA AL PATIO ORLANDO FALS BORDA

UN PACTO DE HONRADEZ.

WILLIAM JAVIER DIAZ RAMIREZ

Defensor de Derechos Humanos, Educador y Librepensador

Preso de conciencia y político, detenido injusta y arbitrariamente desde el 14 de Noviembre de 2008.

“Todo libro es un Aladino maravilloso, que abre en nuestros ojos, el mágico palacio del ensueño;

 ¡Que vasto proveedor de ilusión, es todo libro, por árido que sea!...”

 La voz de las Horas. Jose María Vargas Vila.

LIBROS E HISTORIA

Los libros han ayudado a trazar y a recorrer los caminos de libertad que la humanidad ha buscado en el trasegar de su historia, en un comienzo eran herramientas privilegiadas de la conservación y la transmisión de los saberes, se quemaban o se escondían los que ponían en riesgo el Estatu quo y se conservaban y divulgaban, aunque en forma limitada, los que lo perpetuaban. Es por esto que la aparición de la imprenta, como construcción de Gutenberg o la invención de los Chinos, es un acto revolucionario, pues da la fórmula de difusión masiva del pensamiento.

Martin Lutero es uno de los primeros en comprender la importancia de la divulgación del conocimiento y al traducir la biblia, así como al dar a conocer sus críticas a la iglesia católica genera una de las mas grandes revoluciones de la iglesia, la Reforma, que proyecta a la humanidad y fija los cimientos de la modernidad, sin embargo, la contrarreforma atrasa los cambios, aunque termine sucumbiendo ante la historia.

Los libros invaden a Europa, las bibliotecas se multiplican, la gran perdida de Alejandría, después de siglos es resarcida, aunque nunca de manera completa. La ilustración jamás se hubiera dado sin los libros de mano en mano, la Enciclopedia fue un arma de “destrucción masiva”, que invadió la conciencia emancipadora de los hombres, la libertad, la fraternidad y la igualdad, no se hubiesen encontrado al ritmo de la Marsellesa sin la ayuda subversiva de los libros, en esa otra gran transformación, la revolución francesa.

Europa plago a América de miseria y enfermedades, sin embargo, luego de toda invasión los pueblos sometidos redefinen su cultura y transforman al invasor, así mismo el primero asimila ante todo algunas cosas buenas, entre esas el legado de occidente resumido entre sus libros, donde lo humano supera a la barbarie, mas allá de ser  utilizados para justificar las masacres de otros pueblos como se hace con la biblia y se ha hecho también con el Corán.

LIBROS EN CAUTIVERIO

Ese principio liberador y ante todo esa herramienta de paz en que se deben y pueden convertir los libros, motiva hoy el esfuerzo de los presos de conciencia, políticos y sociales de la cárcel la Picota de Bogotá que a través de la  denominadas bibliotecas al Patio, coloca al alcance directo de cada uno de los prisioneros cientos y hasta miles de libros, prestados y donados por ellos mismos, por instituciones educativas, ONG’s y particulares, también por la “biblioteca Central” y la biblioteca Luis Ángel Arango. La pionera  fue la del patio numero 2, bautizada con el nombre del padre de la sociología en Colombia, Orlando Fals Borda; la del patio 4, con el nombre de uno de los mártires del genocidio de la UP, Jaime Pardo Leal y la del tercero con el nombre de los defensores de derechos humanos y grandes maestros de los derechos de los pueblos, Eduardo Umaña.

En este sentido, se busca al mismo tiempo, que la población carcelaria, de  cada uno de los patios, haga conciencia de la importancia y beneficios de tener una biblioteca, vaya conociendo parte de esa historia mediada por la violencia de nuestro país, identificando los aportes hechos en vida, por estos otros hombres y mujeres que por pensar distinto y luchar por la construcción de otra Colombia posible, han sido asesinados, perseguidos, y muchos como nosotros encarcelados y torturados.  No son ajenos a nuestra realidad y a nuestro dolor, por eso es muy buen estimulo recordarlos siempre que leemos  y ojeamos un libro, periódico o revista, en estas bibliotecas.

La propuesta que hemos hecho, consiste en que en cada patio con la iniciativa, el trabajo y el esfuerzo de todos los presos, con el apoyo del área de educativas y la solidaridad de nuestros pueblos, construya tantas bibliotecas como patios existen en la cárcel, por el momento aspiramos a que sea en los 7 patios del ala oriental de La Picota, llevamos por ahora 3 bibliotecas constituidas, luego de 6 meses de trabajo, de esfuerzo.

Es agradable observar como solo unos libros junto a unos cuantos muebles cambian radicalmente el ambiente y la convivencia carcelaria, como se le roba gente al tedio, la pereza, el odio y la frustración; como la poesía, los cuentos, las novelas, la historia y hasta la filosofía, invaden los rincones que antes abrigaban el dolor, el terror y la muerte, como se cambia el insulto por una pregunta,  una posible respuesta, o una simple y muy cálida opinión, como las revistas nos permiten leer en imágenes la realidad que no podemos leer en las letras, por la condición de analfabetas; como los diferentes credos religiosos leen y comparten sus distintas interpretaciones de la fe, como se buscan entre autores y libros otras proyecciones de la espiritualidad, como se le gana terreno a la condición alienante de la televisión, a los pasatiempos y los juegos de azar; como entre los alias, nombres propios y ficticios se nombran nuevos personajes en la cárcel recorren los pasillos se sumergen en las celdas  y llegan al oído, los Sócrates, Platón, Aristóteles, Séneca, Maquiavelo, Moro, Kant, Spinoza, Leibniz, Nietzsche , los Freud, los Coello, los Marx, los Ospina, los Borges, los Freire, los Lesing, los Dostoievski, Faulkner, Saramago, Lenin, Fusic, Galeano, Sábato, Cortázar, Rousseau, Trujillo, Harnecker, Ponce, Fals, Umaña, Machado, Vargas Vila, García Márquez, Neruda, entre muchos otros que quizá nunca se hubieran podido escuchar en estos lugares si no se invade con los libros estos recintos de la muerte donde se sepultan hombres en vida

LIBROS Y CAMBIO SOCIAL

En este orden podemos considerar que hay libros que han cambiado o influenciado a la humanidad para bien o para mal, por ejemplo el manifiesto del Partido Comunista o El Capital, de Carlos Marx, que luego de su aparición hace más de 150 años, ha transformado el planeta y la historia, nos ha devuelto la posibilidad de construir una sociedad más justa, más equilibrada, más equitativa, millones de personas nos hemos inspirado en este planteamiento, para buscar esos cambios y seguimos en esa brega, luego de muchos fracasos. Unos libros, un autor, su pensamiento, guiando e inspirando la vida y la lucha de los hombres. Lo mismo podríamos decir quizá de El Príncipe de Maquiavelo, libro que ilustra muy bien los pasos a seguir para conquistar y mantener el poder, sin reparos ni escrúpulos, también millones de hombres referencian su quehacer cotidiano en El Príncipe, y quizás no haya gobernante hoy en día que no lo tenga en cuenta para mantener su poder. Ni que decir de los libros sagrados, que son guía para múltiples religiones, por ejemplo el Corán o  la Biblia que son la guía política, espiritual y moral de muchos pueblos.

Es por esto que los libros deben ser una herramienta fundamental en todo proceso de transformación social, son base de la educación y de la denominada resocialización  en estos espacios carcelarios. Sin embargo, el cúmulo de papel y tinta como base importante de un libro, en su conjunto no son más que un objeto, para unos de lujo, que decoran, entre más grande y suntuoso su casa o apartamento, se instala de acuerdo al gusto y al intelecto del decorador, los libros por metro; para las grandes editoriales el libro es un bien de consumo por el consumo, son una cosa más que se compra para quien sabe qué,  pero, dicen algunos, y se anuncia en los medios y la gente los compra, será por algo, para qué?, quien sabe, pero para algo será; es la lógica absurda del consumo, del mercado. Aquí en la cárcel también a veces decoran nuestra celda, cambuche o rincón; sirve de almohada, de escudo, de arma, o hasta de caleta, para algunos es un buen consuelo, es una migo, es una compañía o fuente de sabiduría.  Extender estas últimas valoraciones del libro, es la razón principal de nuestro trabajo en la consolidación del proyecto “Bibliotecas al patio Orlando Fals Borda”.

TALLER LITERARIO JOSÉ MARIA VARGAS VILA

Esta iniciativa no es solo la acumulación o almacenamiento de libros, busca promover e incentivar su lectura, a la vez orientar su comprensión y socializar la experiencia creadora de leer, en este propósito se realiza también un taller literario denominado José María Vargas Vila, con unos niveles básicos semestrales de resumen, reseña y ensayo, como producto de su aproximación a los libros. Esto se hace con los mejores lectores de cada biblioteca, cada uno lleva su resumen del libro leído durante la semana, lo acompaña de un glosario y en el taller se habla en una primera parte sobre alguna temática literaria, por ejemplo la historia, la importancia y la función social del libro; ya en un segundo momento alguno o algunos de los asistentes presenta su ejercicio académico con el libro de su elección, puede ser una novela, un libro de poesía, política, historia o religión, el lector dice sus pro y contra del libro, quien quiera controvierte y refuerza el argumento, así pasamos a la etapa final, es decir el compartir y discutir la definición de términos desconocidos, en un comienzo nos aproximamos con lo poco que sabemos, luego, reafirmamos con los diccionarios o libros que hablen sobre el tema, así consumamos un ritual semanal que invoca al objeto sagrado receptor y reproductor de mundos infinitos de sabiduría en estas búsquedas aún más inconclusas por el encierro, aquí se disminuye la libertad, pero aumentan las angustias y las preguntas.

Es así como la lectura en el presidio no es ni mejor ni peor que la lectura en las aulas universitarias o en el cómodo sofá de nuestra casa, solamente es otra, muy distinta, como todas las lecturas, que alimenta de otra forma ese apetito insaciable del saber, que en un comienzo lo hacemos con el leer por leer, algo se aprende, dicen,  luego se orienta el proceso a una lectura sistemática, analítica y dialéctica, la que de verdad permita aprender, comprender y construir, ejemplos hay muchos en la historia, de cómo se pueden parir grandes obras entre rejas, Miguel de Cervantes, Antonio Gramsci, Julius Fucik,  Fidel Castro y María Tila Uribe, entre otros.

CLINICA DEL LIBRO

La Biblioteca al patio Orlando Fals Borda, como un conjunto de servicios culturales (que es lo que en esencia es una biblioteca) para sus lectores, ofrece la reparación y mantenimiento de los libros, en un subproyecto llamado “Clínica del libro”, donde en palabras de médicos y enfermeros: “quedan mejor que nuevos”, muestra esto el cariño y compromiso con que se observa este constructo colectivo que deja de lado prejuicios y trabaja por un bien común, protegiendo el alma de una biblioteca como son los libros que debieran perdurar en este y todos los lugares ojalá por siempre.

De igual manera, a través de este medio libertario en que se convierten los libros, buscamos reconocernos y reconocer a los otros, así como reconocer nuestro contexto y el mundo, entendiendo que somos un producto social y que a responsabilidad de estar aquí es compartida entre individuo y sociedad, no podemos hacer del complejo de culpa la peor de las cadenas o la piedra que te hunde en las profundidades de la desesperanza. Los libros y su reflexión han de darnos los elementos suficientes para interactuar con el mundo y hacer conciencia del cambio, es por esto que las bibliotecas al patio están de puertas abiertas las 24 horas del día, a decir verdad, no tienen puertas y los están a disposición siempre de los presos buscando generar sentido de pertenencia, pues es un bien común, no es propiedad privada, aunque hay uno que otro libro que se pierde, son más los que ellos mismos donan, esto define un compromiso, un pacto de honradez, como cuota inicial para la construcción de la nueva sociedad.

CONTINUANDO UN LEGADO

Este proyecto de Bibliotecas mantiene la consigna del maestro Fals en su proyecto de revistas Alternativa y CEPA: “atreverse a pensar y luchar, es empezar a vencer”, aquí le agregamos la de: “menos dolor, más amor, todos por la educación”, como una forma de protesta contra la interminable y atroz guerra a la que nos somete el sistema capitalista y la clase dirigente de nuestro país, lo que nos obliga a repensarnos la salida de este laberinto de odio, dolor y muerte, del que pareciera no podemos salir. Sin embargo creemos, los presos de conciencia, políticos y sociales que en los libros y en la educación, está ese Hilo de Ariadna que nos ayudará a salir y sepultar el minotauro de la guerra.

“Los libros son el polen que lleva las semillas de la revolución y al mismo tiempo acondiciona entre hojas y letras el terreno para que germinen los sueños y las utopías”

(El Paisa, un forjador de libertades en la Picota)

¡Done un libro para sembrar semillas de libertad!.

Informes: Oficina de Bienestar Institucional. Universidad Distrital Francisco José de Caldas, Carrera 8 #40-62

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Asociación Distrital de Educadores, sede norte. Calle 25ª No. 31-30. Teléfonos:  3440742, 2686876.

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